Misma escena, diferente toma.
Aprendiendo a manejar las velocidades con una fuente en la ciudad de Almería. Este fue el resultado.
Con una velocidad de obturación muy lenta (inferior a 1/60) obtuve efectos del agua en movimiento, dispersa. El obturador permanece abierto más tiempo dejando pasar más luz.
Mientras que con velocidades rápidas (superior a 1/60) consiguiendo sensación de agua congelada. El obturador permanece abierto muy poco tiempo dejando pasar menos luz hacia el elemento, en este caso el agua.
